En los últimos tres días han llegado a España más de 60 cubanos. Son familiares de los 6 cubanos deportados «voluntariamente» por el gobierno Cubano, gracias a la intermediación de la iglesia católica, y que el gobierno español ha acogido generosamente. No es la primera vez que esto ocurre, y he podido vivir en otros momentos situaciones similiares. Los primeros días todos son apoyos, llamadas, fotos… unos señores que llevan 7 años en prisión se convierten en famosos y entre la emoción de la recien recuperada libertad y el calor de las cámaras se introducen en un mundo irreal. Esto dura poco, bastan unos pocos días para que desaparezcan sus amigos, se apagen los focos, y empiecen a descubrir la dureza de vivir fuera de la patria, sin raices, sin referencias, y sin recursos materiales.

Esta vez el efecto «más dura será la caída» ha sido más rápido de lo normal. El gobierno español no tenía preparada la llegada de un número tan grande de personas, 60 hasta la fecha, y si seguimos la proporción, pronto pueden llegar a España otras 400 personas más, en condiciones miserables. De momento son 60, de todas las edades, desde 28 dias hasta setenta y muchos años y, literalmente, han venido con lo puesto.

Pronto abandonaran su residencia particular, un hostal situado en Vallecas, para ser distribuidos por centros de inmigrantes de toda España. De momento parece que la próxima semana saldrán para Alicante y Malaga, pero no tienen ni una muda, ni una bolsa donde meter lo más básico.

Por eso hemos pensado intentar ayudar un poco. Estamos recogiendo ropa y maletas EN BUEN ESTADO en la Fundación Hispano Cubana (C/Orfila, 8), nosotros se lo haremos llegar. Cualquier ayuda será bienvenida.